jueves, 25 de julio de 2013

SUSPENDIDO EL FERRY: CAMBIO DE PLANES

Hola familia y amigos: Al final la cosa pinta mal. El ferry que estábamos esperando para pasar de Turquía a Egipto se ha suspendido. Al parecer el barco está retenido en Port Said, puerto de destino, con 100 camiones y camioneros abordo esperando el permiso de Aduanas para desembarcar. Al menos eso es lo que nos dicen en la naviera. Según esta gente, el servicio no se reanudará hasta el 18 de Julio, y después tampoco aseguran que vuelva a funcionar. Con este panorama hemos decidido irnos a visitar Armenia y Georgia que son dos países limítrofes y no exigen visado. Habíamos barajado innumerables posibilidades. Embarcar la furgoneta a Sudán (demasiado caro, más de 3000€). Dejarla por aquí y volar a Kenia-Tanzania. Irnos a Vladivostok, pero la visa de Rusia hay que sacársela en Madrid, ir a la India, pero las visas de India y Pakistán hay que sacárselas en Madrid, etc., etc., etc. Varios días dándole vueltas a la cabeza. Al final, lo dicho: visitar Armenia y Georgia y el día 18 llamaremos a la naviera por si el barco volviera a funcionar.
En fin, como os podréis imaginar, una gran decepción. Pero al mal tiempo buena cara. Ahora tiramos hacia el norte de Turquía, dirección a los países mencionados, que también tienen su interés.
Durante estos días de espera pasados tampoco nos hemos aburrido. Hemos hecho excursiones por la zona, hemos ido a varias playas y nos hemos pegado unos cuantos homenajes gastronómicos. Quisiera describiros el KÜNEEFE: es un postre hecho sobre una base fina de bizcocho; encima lleva queso tierno de un tipo especial y arriba del todo una especie de cabello de ángel hecho de masa de crêpe. Todo ello horneado e impregnado en miel. Se toma caliente y es una delicia increíble, de marearse. Eso sí, contundente. Diabéticos abstenerse.
Degustando el küneefe
Fabricando hiladura de masa para küneefe
Mercado cubierto en Antakia
Mosaicos en el museo de Antakia
Camino de Antakia (Antioquía)
No sabemos cómo va a estar la cosa referente a internet durante los próximos días, así que si no hay noticias ya sabéis la causa. Siento no poder contaros historias del desierto blanco de Egipto, de campamentos a orillas del Nilo, de tés tomados en casa de los hospitalarios sudaneses o de aventuras de carreteras por los infernales caminos de norte de Kenia. De momento sólo os puedo contar nuestro viaje por esta zona.


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